Todos andan sus caminos sin ver más allá de lo que sus ojos ven a simple vista. Es tan egoísta el ser humano? será innato ese desdén hacia los demás? bastaría solo con detenernos y observar para encontrar un sin fin de mundos que explorar en rostros que vagan como sombras al mismo son que lamentablemente nosotros bailamos..
No es tanto lo lamentable sino el poder bailar con astucia, picardía y valor, día a día a veces nos envuelve la rutina llegando al punto d quedar como esta..! (igual)
Y que hacer para salir de ella? muchos dirían que deberíamos soltar las riendas a la mente y seguirla, pero yo pienso distinto. Es ella la que se encarga de mantenernos exactamente donde estamos, encarcelados en lo que hacemos, lo que pensamos, lo que queremos pero no nos permitimos alcanzar..
Por temor a errar, algo q por naturaleza es indiscutible de evadir...dichoso es aquel que intenta hacerlo diferente…
Y aun más dichoso aquel que logra desinhibirse de toda limitación que conlleva el temer al fracaso..
Una palabra que no es ni muy corta ni muy larga, y sin embargo intimida sin preámbulo a muchos...
Mas que por el hecho de no alcanzar lo que quieran, por el hecho de que serán juzgados y señalados por todas esas sombras que para lo que verdaderamente importa están ciegas..
Escrito por Yessica Caruci y Yolver Jiménez